Uno de los casos más comentados en Japón es el de los ladrones de bragas y ropa interior. Incluso muchos brasileños que han vivido en Japón dicen que les han robado las bragas y la ropa interior del tendedero. En este artículo vamos a entender el misterio de por qué los japoneses roban bragas.
En Japón, puedes dejar una blusa de marca donde quieras, pero si dejas unas bragas o un sujetador en el tendedero exterior, irán a por ellos. Para que te hagas una idea, en 2017 se registraron más de 10.000 casos de robo de bragas en la policía japonesa, y se resolvieron unos 4.000 casos.
En Japón, los ladrones de bragas son llamados shitage dorobou [下着泥棒] que significa ladrón de ropa íntima.
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¿Por qué roban las bragas japonesas?
Los hombres suelen robar bragas para olerlas y masticarlas porque tienen fetiches. Pero ha habido casos de hombres que roban bragas para ponérselas, o simplemente para coleccionarlas.
El fetiche por calzoncillos en Japón es tan común que existen máquinas expendedoras de calzoncillos usados. Recomendamos leer también nuestro artículo sobre calzoncillos para entender su cultura.
¿Quién roba las bragas?
Mucha gente imagina que el robo de bragas suele ser obra de hombres pervertidos, pero no siempre es así: incluso las mujeres roban bragas y ropa del tendedero.
Las mujeres también pueden robar bragas para uso personal. Según la policía, cuando se roban dos bragas con sujetador, suele tratarse de una mujer.
¿Cuál es el daño causado por los ladrones de bragas?
Una encuesta realizada en el sitio InfoQ presenta algunos datos interesantes sobre robos de calzoncillos. La encuesta revela que aproximadamente 8% de las encuestadas ya han tenido sus calzoncillos y ropa interior robados.
La encuesta revela que alrededor del 25% han sufrido el robo de más de cuatro piezas. Los principales colores robados son el blanco, el negro y el rosa, y más del 70% de los robos se producen en los balcones de las casas.
¿Cómo roban los japoneses las bragas?
La mayoría de las veces, los robos se producen en tendederos exteriores, pero bien podrían ocurrir en el balcón de un edificio elevado si dejas abierta la ventana de tu piso.
Algunos también roban en lavanderías públicas, pero ha habido varios informes de casos extremos en los que hombres han abordado a mujeres en la calle y les han pedido que se quitaran las bragas, a veces por la fuerza o ofreciéndoles dinero.
Algunos ladrones profesionales incluso entran en las casas. Hubo una vez un ladrón que fue detenido por robar 34 pares de bragas de una casa. Imagínate volver a casa y tener que comprar bragas otra vez. Al menos no robó el televisor ni el ordenador.
Ha habido casos de robo de bragas en los que el ladrón incluso tenía cómplices femeninas. Si crees que 34 bragas no son suficientes, una persona fue detenida con más de 5.000 bragas en su casa.
Reglas y Policía contra el robo de bragas
El problema está reconocido, hasta el punto de que la policía se esfuerza por perseguir a un ladrón en bragas, algo que no suele ocurrir en Occidente, donde la policía prefiere no esforzarse mucho.
En Japón, hay una ley para prevenir el robo específico de calzones. Quien sea atrapado haciendo esto irá a prisión por hasta 10 años y además pagará 500.000 yenes de multa, ya que el acto es considerado perversión y no solo un simple robo de pertenencia.
Algunas lavanderías tienen normas sobre la ropa interior y recomiendan no dejarla a la intemperie ni toda la noche en la lavandería.
También se advierte a las mujeres que no dejen la ropa interior o la lencería fuera durante la noche, porque desaparecen, independientemente de si se vive en un piso o en una casa.
Cuando se acude a un Koban para denunciar el robo de unas bragas, la policía se toma el asunto en serio y pregunta por el color y la talla. Algunos agentes pueden ir al lugar del delito e incluso hacer diagramas.
¿Solo los japoneses roban bragas?
A los occidentales nos parece muy raro que los hombres roben ropa interior, pero en realidad también puede ser bastante habitual en otros lugares.
De hecho, pervertidos hay en todas partes. Probablemente lo que diferencia a los pervertidos japoneses de los occidentales es la falsa moral que los japoneses están acostumbrados a seguir, de modo que en lugar de violar a inocentes, algunos se contentan con robar bragas.
En medio de discusiones sobre ropa interior en Japón, me encontré con diversas personas que vivían en Estados Unidos quejándose de que su ropa interior fue robada de un Coin Laundry. De hecho, al buscar en Google Imágenes por ladrones de bragas en inglés, casi no encontré imágenes de japoneses.
Puede que la delincuencia no sea muy común en Brasil, entre otras cosas porque nadie lava la ropa en una lavandería pública y la mayoría de las casas suelen estar rodeadas de muros. Pero, ¿qué ocurre en los países sin muros?
También he encontrado comentarios de brasileñas que afirman que otras brasileñas les han robado las bragas del tendedero en Japón, lo que demuestra que no es un fetiche ni algo exclusivo de los japoneses.
¿Cómo evitar que te roben las bragas en Japón?
Lo obvio es no dejarlas en el tendedero exterior, la mayoría de las japonesas lo saben, algunas intentan esconder la ropa con una toalla, pero los ladrones ya conocen este truco, así que sigue habiendo riesgos.
En general, los ladrones de bragas roban más en casas y pisos que en la propia lavandería de monedas, a menudo porque los japoneses, acostumbrados a la tranquilidad del país, dejan las puertas sin cerrar.
Puede que alguno de tus vecinos sea un ladrón de bragas, así que ten mucho cuidado. Cualquier tipo de lencería o sujetador también es susceptible de robo.
Hasta incluso en un onsen, las mujeres necesitan tener cuidado al dejar sus calzones en una cesta. Ya ha habido muchos casos de hombres invadiendo vestuarios femeninos para robar calzones o incluso contratando a otras mujeres para hacer este servicio.
El siguiente vídeo está en inglés, pero se pueden añadir subtítulos traducidos. Cuenta algunos datos interesantes sobre el robo de bragas en Japón y otros tipos de delitos: